Los
McAllister olvidan a su hijo pequeño en casa (creo que conscientemente dado lo
cansino que puede resultar el niño), pero este en vez de angustiarse y llorar a
moco tendido, decide montarse un Risky Bussiness versión infante.
Homenaje de Chris Columbus al
slapstick con tintes casi de dibujo animado que descubriría al mundo a Macaulay
Culkin, y a los padres de este la
capacidad como máquina registradora de su pequeño vástago, aunque siempre he
preferido la comicidad física de la dupla formada por Joe Pesci y Daniel Stern
que los excesos gestuales del pequeño Kevin. Eso sí, hizo que todos los padres
del mundo pasaran revista dos veces antes de salir de viaje.
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