Un planeta llamado Krypton explota
y solo un bebe logra sobrevivir, llegando a la Tierra en una nave espacial. Con
eso de que es extraterrestre desarrolla unos super poderes que le convierten en
prácticamente indestructible, dedicándose a hacer el bien en los ratos libres
que le deja su verdadera profesión, la de periodista un poco torpe.
Richard
Donner demuestra que se puede hacer una película de super héroes de calidad, y
aunque los efectos especiales han envejecido un poco malamente, es verdad eso
que dice su frase promocional de “creerás que un hombre puede volar”. El modelo
en el que se siguen mirando todas las películas del mismo estilo. Por cierto,
no hay dudas, Christopher Reeve es Superman.
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