CASCO DE ACERO (1951)

El sargento Zack recibirá el prestigioso premio “Flor en el culo” cuándo su casco detenga una bala cuyo destino era su cabeza. Pero ni con esas se le quitará la mala leche propia de quien pelea de frente en el frente.

Samuel Fuller ofrece un relato bélico que a pesar de sus limitaciones de presupuesto (las secuencias de batalla cantan a imágenes de archivo) es tremendamente enérgico y veraz, no por nada el director era veterano de guerra. Con un grupo de personajes sumamente interesantes, la película nos enseña la otra cara de las contiendas bélicas y además se atreve a hablar de una guerra hasta ese momento no abordada en el cine por impopular, la de Corea.