Skynet
acaba resultando una máquina bastante terca que insiste en acabar con John
Connor antes que este alcance la pubertad. Para ello mandará del futuro un nuevo
ciborg mejorado que hace que la Thermomix 2000 parezca del pleistoceno,
viajando también nuestro adorado Arnold nuevamente
con toda la cacha al aire.
James Cameron eleva la saga
Terminator a la estratosfera del cine de acción y ciencia ficción, convirtiendo
a esta película en bisagra entre la
manera de rodar todo el cine evasivo hasta la llegada de este título y toda una
nueva forma de filmar amparada en el uso y abuso de computadoras, algo curioso
tratándose de una película que habla de lo que habla. Ahora no hay spoiler
posible si decimos que Schwarzenegger es el bueno, pero en el momento de su
estreno esa era una de las bazas ocultas y que nos brindaba uno de los
momentazos de la película. Y hay que añadir, Guns N Roses le deben mucho a
Terminator 2.
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