jueves, 18 de julio de 2019

EL FOTÓGRAFO DEL PÁNICO (1960)


Mark Lewis es un  apocado camarógrafo que tras una apariencia angelical, casi de gilipollas integral, esconde a un perturbador voyeur con afición por el noble arte del ensartamiento cárnico femenino.

Uno de los hitos obligados del cine de suspense, y junto con Psicosis el padre y madre de todas las películas con psicópata incluido que vendrían después. Los ingleses demuestran que a retorcidos no hay quien les gane y nos obsequian con una película visualmente a años luz de los que se veía en aquellos primeros sesenta y que dejan claro una vez más que el cine moderno no es aquel estrenado a partir del año dos mil. Michael Powell, su director, ya había dejado constancia anteriormente de su talento tras las cámaras, pero ahora además dejaba clara sus agallas por estrenar una película como esta hace ya casi sesenta años.

No hay comentarios:

Publicar un comentario